Cortina de humo.

Ayer Pinocho Rajoy y sus secuaces rubricaron uno de los mayores, por no decir el mayor, asalto contra la ciudadanía indefensa de la historia de la democracia. Metiendo la mano en el bolsillo de todos, funcionarios, pensionistas, parados, jóvenes, autónomos, pequeños comerciantes... todo para favorecer a esa banca que paga sueldos por encima del millón de euros (!!!) a los altos ejecutivos, a la banca y las grandes empresas alemanas y a esa asquerosa casta de políticos, asesores y parásitos que, sin aprobar ni probar nada, chupan como sanguijuelas repugnantes de los caudales públicos, los que son de todos.



Y de nuevo, en un ejercicio cínico y despiadado, el PP vuelve a sacar, sin el más mínimo pudor o sensibilidad, los cadáveres de aquellos que ETA mato con cobardía. Se repiten las semblanzas de Miguel Ángel Blanco en las televisiones justo después de las declaraciones de los jerarcas del cinismo y la incompetencia, anunciando como tendremos que pagar entre todos, los pelotazos y la corrupción de una partida de salteadores de caminos, incultos y sinvergüenzas.
Y se hace enarbolando la bandera de las victimas de ETA, olvidando aquellos militantes de otros partidos, aquellos profesionales (militares, policías...) y aquellos que solo eran ciudadanos anónimos y que murieron por la locura de unos cuantos. Ahora la codicia y la locura de nuestros indignos gobernantes se escuda en esos muertos y se escudan los mismos que no querían
desenterrar los muertos del fascismo, que los querían esconder bajo la alfombra.
No nos dejemos engañar, no les importan las victimas del terrorismo, solo quieren alguien tras los que esconderse después de vendernos y mentirnos, por que lo primero que son es COBARDES.

¿Hasta cuando tendremos que aguantar a esta partida de desalmados, borricos e impresentables que se han enquistado en los resortes de poder del país? ¿Hasta cuando deberemos de soportar el lamentable espectáculo de ver como se arrodillan serviles nuestros dirigentes ante esas autenticas acémilas, sin ideas ni sentido común, que dominan la unión europea? ¿Cuanto dolor hemos de padecer hasta que gritemos BASTA?

Insurrección de “El último de fila”.


Y todo al grito de “que se jodan”, de una impresentable. Ni educación tienen. Eso si, soltar a sus esbirros a dar palos parece ser lo unico que saben hacer bien.