Los viejos rockeros nunca mueren.

Nos llega la noticia de la muerte de Denis Ritchie el pasado día 8 y al conocerla no he podido evitar un estremecimiento recordando lo que representa este autentico genio de la informática.

Desconocido para el gran público, en franco contraste con Steve Jobs que ha sido un autentico fenómeno mediático, el mundo actual probablemente no seria el mismo sin los trabajos de Ritchie (un de los padres del UNIX y del lenguaje C). Ritchie y Thomson siempre han encarnado, al menos para mi, la imagen del genio inconformista y enamorado de su trabajo, de los que curiosamente el laboratorio Bell de la entonces AT&T en Palo Alto parecía en los años 70 un vivero. Su gran capacidad y el amor por su trabajo le llevo a embarcarse en la creación de lo que seria el lenguaje C y a apoyar a Ken Thompson en el desarrollo del UNIX. Activo hasta hace muy poco nos deja un poco huérfanos a todos los informáticos, aunque sus trabajos ya le han hecho inmortal.



Ya lo decía Miguel Ríos.

Manzanas.

Ha muerto Steve Jobs. Pocas cosas se pueden decir que no se hayan repetido hasta la saciedad. Muchos de estos tópicos dichos una y otra vez son plenamente ciertos: Visionario, innovador., arriesgado y adelantado a su momento. Tuvo grandes éxitos y cosecho batacazos considerables. Parecía nacido para ser odiado y amado a partes iguales y con pasión. Sin medias tintas.

Yo, sobre la imagen de empresario del diseño que se trasmite últimamente, me quedo con la de una persona obsesiva, un tanto gamberra pero en el fondo simpática de “Piratas de Silicon Valley”.



Descanse en paz uno de los hombres que hizo cambiar el mundo.

¿De que hostias se ríen?

No deja de llamarme la atención la actitud de los prohombres (y promujeres) europeos cuando se reúnen para hacernos, una y otra vez, la puñeta a los ciudadanos de a pie, sobre todo a los del sur. Salen, los tíos y tías, bien cebados, con buenos trajes, buenos coches y todo pagado y repagado por nosotros. Y lo que mas fastidia con la que esta cayendo: Salen riéndose, hablando animadamente entre ellos como si todo fuese viento en popa. Da igual que sea Papandreu tras echar a la calle a 30.000 funcionarios, o que sea Merkel imponiendo su ideología luterana y estreñida a todo quisque con su habitual chulería.

Ellos gestionan la crisis, probablemente a cuenta de sus amigos de los bancos que cobran indemnizaciones por encima del millón de euros, pero no va con ellos. A ellos no les afecta. No son, en palabras del infumable Duran i Lleida, funcionarios ni pobretones. Ellos son señores de avión pagado por sus estados, sueldos cercanos al centenar de miles de euros y negocios de ni se sabe cuanto.

No, no son en verdad ningunos pobretones. Ellos no tienen nada que ver con ese funcionario al que le han mordido el sueldo, que le han quitado pagas extra y no sabe como llegar a fin de mes o si al final les echaran a la calle, ni con ese parado que ha agotado las prestaciones, que sobrevive con 400 euros y encima parece que tiene que estar agradecido. Tampoco tienen que ver con esos pensionistas congelados y engañados, que están a punto de perder su casa de toda la vida por que cometieron el error de avalar a un hijo que no supo negarse a los cantos de sirena de inmobiliarias y bancos. Ni por supuesto con ese trabajador con poca formaciíon que de cobrar 3.000 euros al mes y vivir en el mundo de la felicidad absoluta, ha pasado a cobrar 600 euros (por que el resto era variable o en negro) y que ha perdido la casa, el coche, debe 200.000 euros al banco y casi pierde la familia.

Supongo que se ríen de nosotros, de como nos están metiendo en el tercer mundo a empellones. Se ríen de lo mal que nos va y de lo bien que les va a ellos.



"Finally the tables are starting to turn
Talkin' bout a revolution....."

¿Hablamos de la revolución?